Del 2 al 4 de julio Intermón Oxfam organiza el III Seminario 'Educar para al Ciudadanía Global', en Los Negrales, Madrid. Intermón Oxfam promueve, desde 1987, la educación en valores; inicialmente a través de materiales educativos y, en la actualidad, promoviendo espacios de reflexión y debate en la comunidad escolar.

viernes, 2 de noviembre de 2007

“Las escuelas que no se liguen a la vida tienen los días contados”.

O lo que es lo mismo: “Instruir y sólo instruir es educación del siglo pasado”. Son palabras de Florencio Luengo, docente y coordinador del Proyecto Atlántida, un conjunto de experiencias en centros y municipios que pretenden proyectar la ciudadanía global sobre el currículo, la organización de los centros y sus relaciones con las familias, el entorno y los agentes sociales. Para Luengo, “lo que ha entrado en crisis es que la escuela trabaje sólo el currículo formal. Es fundamental que en el aula se trabaje también el discurso informal y el no formal, es decir, lo que ocurre en los medios de comunicación, en casa, en la calle, durante el tiempo libre... La educación del futuro será el currículo global porque lo que los niños saben no es sólo lo que aprenden en el aula si no lo que aprenden en el aula y en la vida”.

Según Luengo, la escuela actual continúa fomentando el aprendizaje igual que hace un siglo: “Los niños españoles no memorizan mal pero no aplican lo que memorizan. Demasiadas fórmulas impiden que el alumno entienda el problema, no resuelve el tema práctico”. La educación para el futuro, afirma, quiere resolver cuestiones prácticas y aportar valores que no queden en una ‘asignatura raquítica’: “Es necesario un cambio de cultura para llevar la democracia a la escuela. Sabemos que los que sacan 9 y 10 no son los niños más felices. Los que tienen inteligencia múltiple se manejan mejor en la vida. El 9 y el 10 no son los que te sacarán de una zanja si te caes con el coche, van a ser los otros, los que respetan, dialogan. Lo que queremos son ciudadanos más humanos. Por eso los valores tienen que estar integrados en el currículo general”. Todo esto obligará a modificar el discurso en las aulas.

En este sentido, asegura Luengo, es fundamental crear redes de profesorado que compartan experiencias e información. Hay que construir colectivamente y dejar de estar solos: “Con la pataleta de claustro y de bar no se llega a ningún sitio, con el harakiri no se puede avanzar”.

“Como decía Einstein, ‘Si quieres resultados diferentes no hagas siempre lo mismo’. Para todos los que quieran más información y ponerse a trabajar recomiendo entrar en innova.usal.es”, concluye.